Skip to content Skip to footer

 Socorro Venegas

Qué honor contar con la presencia de la escritora y editora Socorro Venegas para acompañar a nuestros escritores de narrativa en Under the Volcano 2024. Disfruten de esta entrevista donde comparte sus gustos y delirios literarios.

¿Que libros está leyendo actualmente?

Releo Ellas hablan, de Miriam Toews y El acontecimiento, de Annie Ernaux, para un seminario que doy en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM; leo el libro de poesía Permanece como eco, de Salomón Amkie, una voz que inquieta, muy interesante. 

¿A qué libros recurre a lo largo del tiempo? ¿Por qué?

Me gusta mucho volver a El otoño recorre las islas, de José Carlos Becerra. Fue uno de los primeros poetas que leí, y me parece maravilloso que el tiempo pase y me siga emocionando y conmoviendo, descubro en sus palabras una especie de lenguaje secreto, como si solo me hablara a mí. Cartucho, de Nellie Campobello, es un prodigio de la literatura mexicana, una lección de escritura sin pretensiones, profundamente humana; merece más lectores. También regreso a Bajo el volcán, la novela emblemática de Malcolm Lowry, y en paralelo leo la carta que le escribió a Jonathan Cape, su editor, donde defiende su poética: él quería escribir algo nuevo sobre el fuego del infierno, y eso es Bajo el volcán.

¿Con cuáles tres escritores, vivos o muertos, le gustaría tomar un café o un trago? ¿Por qué? 

Con Nellie Campobello, de quien nunca se supo su paradero final. Me encantaría escucharla contar su vida, más allá de lo que conocemos de su infancia por su escritura. A Clarice Lispector me gustaría preguntarle por la entretela de sus obras, qué leía, qué viajes quería hacer. Con la enorme Marguerite Yourcenar me tomaría un café solo para saber cómo escribió Memorias de Adriano.


¿Tiene alguna pasión o talento secundario aparte de la escritura que podría sorprender a los demás?

Me encanta nadar, no soy nada talentosa pero encuentro en el agua un espacio de meditación. Igual que en un proceso químico, siento que cambian de peso y consistencia las ideas, las emociones, me lleno de ligereza.


¿Cuál fue su momento de mayor desesperación como escritor y cómo lo superó?  

Creo que no he vivido ese momento. Tal vez he sido impaciente, queriendo terminar de escribir un libro: he aprendido a esperarlo.  


¿Si pudiera ofrecer tres consejos a los escritores jóvenes, ¿cuáles serían?

1. Que no se preocupen por cómo se ganarán la vida si deciden dedicarse a la literatura. Es cierto que es un camino difícil, pero ¿cuál no lo es? 

2. Que lean apasionadamente, que amen más leer que escribir. 

3. Que crean en su trabajo, esto no significa ignorar la crítica, significa confiar en que serán capaces de crecer y de aprender incluso del fracaso.